jueves, 11 de junio de 2009

CUANDO LA VIVIENDA SE VUELVE PROTESTA

Esta es una de esas historias que vale la pena ser contada.
En China, hasta abril del año 2007, existió una casa sobre un gran monticulo de tierra en medio de un enorme terreno en el que se llevaban a cabo faenas de construcción. Donde solo debería haber camiones, materiales y maestros "chichas", vivía una familia. Su propietario, la Señora Wu Ping, fue la única persona de 281 familias que vivían en el solar que rechazó la oferta de una nueva casa o la compensación económica para trasladarse a otro sitio cuando el año 2004 unos inversionistas decidieron echar abajo todo para construir un centro comercial. Todo esto a pesar de que el Estado así se lo había ordenado. Los inversionistas, con su tino característico, les cortaron la energía y el agua, y cavaron un pozo de 10 metros de altura alrededor de la vivienda. Al final ganaron los inversionistas no sin antes sacar "canas verdes" por más de tres años peleando con la Señora Wu Ping, quién recibió un millón de yuans (desconozco cuanto es en pesos o dólares pero imagino que mucho) y un nuevo departamento. Ella se convirtió en toda una celebridad apareciendo en numerosos programas de televisión y su manifestación inspiró a otros ciudadanos chinos a resistirse a las "mudanzas obligadas".

Este es solo un ejemplo de las llamadas "nail houses" (su traducción sería algo así como "casas uña") que es un neologismo chino para casas habitadas que cuyos propietarios se rehúsan a vender para hacer sitio al llamado "progreso". Sin embargo a menudo es solo una tentativa para negociar un alto precio de venta.

3 comentarios:

  1. No se porq me recorde de los deudores habitacionales que tanto hinchan. pero ninguno de ha hecho famoso como esta señora

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  2. la cagó...los chinos desconocen conceptos como democracia o derechos humanos

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  3. al ver la foto no pude dejar de preguntarme ¿y como sube a su casa?

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